Mama Ladilla apareció alrededor de las 22
horas, cargados de energía y canciones
de letras ácidas. El concierto fue muy medido al contrapear las canciones
míticas con las de su último trabajo Coprofonia. Sonaron Cosas que joden,
Ataca, Sucedio en Beckelar, Tu fiesta, Chanquete a
muerto, Janfri Guein, Cunilingus Post_mortem, Jamon Beibe, La
polla de mi jefe, Pablito clavo un clavito, Mi nave Mix… clasicazos. Y de su
ultimo plastico, La paja, Fundamentalistas, Farloparlante, Is for llu, Bici sin
sillín, Daba daba… clasicazos. La formación de Mama Ladilla ha cambiado en
varias ocasiones pero nunca ha perdido esa fuerza, Juan abarca alma mater del
proyecto sabe a qué arboles arrimarse. Siempre he ensalzado que la formación de
trio es la que más contundencia demuestran en un directo. Gran lujo disfrutar
de ellos en Cultura inquieta.
Los Coronas, simplemente con ver cómo se
va configurando el escenario y ver los equipos de la banda uno empieza a
disfrutar del concierto, guitarras y amplificadores, auténticas antiguallas de
las que me encantaría saber más, de sonidos limpios y contundente, elegantes y
delirantes, increíbles pero ciertos. La banda ya consolidada en su formación la
conforman los grandes Jorge Pardo y David Krahe a las guitarras, Javi Vacas al
bajo, el Loza a la batería y Yevhen Riechkalov a la trompeta. Los Coronas en su
gira Adiós Sancho nos deleitaron con versiones de Marisol, Los
Bravos, Beatles y Rolling, Muse y Camarón y otras cuantas de cosecha propia
que hicieron las delicias del respetable. Rock and Roll desértico, surfero,
fronterizo y con genética de banda sonora en cada toque de guitarra, soplido de
trompeta o golpe de baqueta. Una gran delicia poder disfrutar de estos enormes
músicos que anunciaban este concierto como su último concierto en Madrid hasta
2017. Gracias Cultura Inquieta.
Cables Nefelibata
No hay comentarios:
Publicar un comentario